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Mantener la compostura

Mantener la compostura en la Administración es complicado, ya que nos dividimos entre el servicio al ciudadano y el cumplimiento de tus obligaciones como trabajador.

Existe una línea muy fina entre cumplir tu juramento como funcionario y cumplir las órdenes de tus superiores. Estudiamos la Ley para aprobar una oposición, que cumples y mantienes durante un tiempo (al principio). Después, uno se acomoda al "status" de su entorno laboral, y como consecuencia, surgen los miedos a decir "no" a un superior, a imponerte como garante del orden jurídico y, en definitiva, a "ser rechazado" por el colectivo de tus compañeros por no integrarte en la "manada".

El funcionario siempre debería tener enmarcado y delante su toma de posesión y el juramento que firma, para recordarse a sí mismo su función. Debería de ser como un espejo, en el que todas las mañanas te miras para no olvidar tu rostro y quién eres.
Ante todo, uno debe mantener una actitud displicente al ciudadano -aunque le reviente las entrañas por dentro el ciudadano poco respetuoso-, porque si todos nos ponemos al mismo nivel, ¿quién marca la pauta del comportamiento cívico y del saber estar? La paciencia y la no identificación con el otro es harto importante. Recuerda tu obligación y tu autoridad, porqué no, no entrando al trapo de las palabras necias. Si no te identificas con los comentarios vejatorios del público no te alterarás. Y si te afecta, por algo será, ¿no crees?
Respecto a las relaciones laborales con los compañeros, idem de idem. Uno debe saber quién es y cuál es su trabajo. Los amigos los elije uno, los compañeros "te los dan pensados", y al trabajo se va a trabajar. Esto no excluye que las relaciones sean cordiales y afectuosas. No obstante, como decía mi abuela, "amigos, pero el borrico en la linde", esto es, sé tú mismo e independízate, ten tu propio criterio y no caigas en la competitividad ni el egocentrismo para aumentar tu autoestima.

Si uno es trabajador, honrado consigo mismo y efectivo, ningún superior está descontento contigo ni "abusará" de su cargo, pues tu conducta impone tu honestidad.

Un saludo a todos.

Evangelina Vela

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